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Cómo sacar un tornillo roto y oxidado: Trucos y consejos

Uno de los problemas más comunes a la hora de quitar un tornillo es que este se encuentre demasiado pegado, roto u oxidado. Si no puedes desaflojar un tornillo ni con una llave de impacto, NO TE PREOCUPES, tiene solución y es más sencilla de lo que piensas. Solo echa un vistazo a este artículo.

Antes de nada, no intentes desaflojarlo a la fuerza, ya que podrías acabar rompiéndolo o dándolo de si.

Si el problema es que el tornillo no tiene cabeza, revisa este artículo.

Por qué se atascan los tornillos oxidados

Cualquier metal expuesto a la humedad es susceptible de sufrir un proceso oxidativo. En zonas mas húmedas, existe mayor grado de oxidación que en zonas más secas. En función de la humedad de tu zona, es conveniente que revises las tuercas con mayor o menor frecuencia, sobre todo si son grandes tuercas.

Asumiendo que no lo has hecho, la oxidación provoca una lenta corrosión que pega la tuerca a la rosca, lo que dificulta su afloje y, no solo eso, sino que la cabeza se deforma, por lo que es más difícil agarrarla para quitarla.

5 pasos para desatascar un tornillo oxidado

Te mostramos varias formas de desatascar ese tornillo o tuerca duro de roer. Empieza por el primero y ves siguiendo si no lo consigues.

1. La Coca-Cola desoxida los tornillos (con tiempo)

Uno de los conservantes de la coca-cola es el ácido fosfórico, que diluye el óxido del hierro, que, junto con el agua, saca completamente el óxido de las piezas. Sin embargo, la espera deberá ser de unas 12 horas, ya que el ácido fosfórico de la coca-cola se encuentra en pequeñas cantidades. Tras este tiempo, intenta sacar el tornillo de nuevo y verás.

2. Sacar el tornillo con pequeños golpes

Agarra un martillo y golpea suavemente el tornillo oxidado en diferentes direcciones. Con esto, ayudarás a despegarlo y a recolocarlo para poder sacarlo, posteriormente, más fácilmente.

3. Usa un desoxidante o aceite multiusos

Ya no se trata de un truco casero, pero existen ciertos materiales diseñados específicamente para ayudar a desoxidar materiales, como los aceites multiusos o desoxidantes (ver en Amazon). Algunos vienen en líquido y otros en spray. Sea cual sea, ten cuidado de que no te caiga en los ojos, ya que son muy corrosivos.

Coloca cierta cantidad de antioxidante en el tornillo y deja actuar durante 15 minutos o media hora si está muy pegado. Tras este tiempo, procede a desaflojarlo.

4. Utiliza una herramienta para calentar tornillos

En Amazon venden calentadores de inducción magnética (ver en Amazon) que te ayudan a calentar el área del tornillo para, después, poder aflojarlo más fácilmente.

5. Degrada la rosca alrededor del tornillo

Este método es el más extremo, ya que se trata de corroer más la zona del tornillo y esto puede dañar más la zona. Sin embargo, de esta forma, podemos facilitar la retirada de la tuerca. ¿Cómo? Utiliza un soplete, y, en caso que no tengas, una simple vela te valdrá. Colócala 10 minutos al lado de la tuerca y conseguirás tu objetivo de despegar el material de la rosca.